jueves, 29 de diciembre de 2011

Unas botas

Un trago de cerveza mientras miro denigrante el aspecto de una sucia rata gammada, le miro de arriba abajo aun recuerdo esas malditas botas militares clavadas en diferentes puntos de mi cuerpo. Recuerdo esas miradas de desprecio al ver sus caras imponiendo superioridad. También ese impulso que me daba para pegarles una patada en sus partes y que se retorcieran de dolor. Pero lo que más recuerdo de esos momentos eran sus botas, sus rojos cordones y su harrington azul, cogiéndome la mano en los momentos donde necesitaba templar mis sentimientos oyendo su voz desgarrada por las botellas de vodka y los porros de Marihuana diciéndome: "¿Quieres calmarte? Si sigues así te van a romper la cara, enana." Es inevitable caer en el recuerdo de esos momentos felices pero degradantes a la vez en los cuales cada vez que oía el ron ron de unas Underground negras, y veía dos chupas llenas de parches me ponía más contenta que una perdiz. No puedo disimular una sonrisa algo malévola. Al andar por la calle muchos dicen que empiezo a disimular mi extremo atuendo, pero en realidad eso no quiere decir nada, ya que los sentimientos y los ideales corren por la sangre. Sentados en un parque veo de nuevo una cara conocida, recuerdo esa marca en la cara, esos gritos por estrechas calles, y esas risas después de un golpe como dios manda. Aun recuerdo a Work, que bien nos lo pasábamos bajo su tutela, el le enseñó los cimientos y le intento enseñar a razonar, algo que nunca se le dio muy bien. Y cuando creo que me vuelvo a ver envuelta en un estruendo similar dudando entre si correr o enfrentarme, vuelvo a oír su voz en mi mente calmando mi sed inminente.

De todo esto derivan los buenos momentos, las tardes en la calle simulando luchas simulando momentos, corriendo para ver quien llegaba más lejos, recuerdo los golpes que me daba para que yo aprendiera, y la cara que se le quedó cuando lo tiré al suelo por primera vez. Recuerdo también mi primera olla, mi primer momento de no sé si, darle la mochila a una fiel compañera y meterme dentro a al aventura, bailar un Oi! violento al son de Decibelios o Eskorbuto. Y sigo ahí con los ojos clavados en alguien que acarrea un momento en su alma en su vida. Las lágrimas enfundaron nuestros ojos cuando le vi sangrar una vez, y me cabreé tanto que no nos dejaron entrar más a ese bar, pero me daba lo mismo, porqué lo nuestro no era una simple cosa del destino. Y me prometí a mi misma dejar ese mundo y volverlo a llevar dónde yo le conocía, dónde sus ojos eran mi patria. Aunque parezca mentira nuestras luchas se empezaron a repetir, y en los ojos de Work las lagrimas estaban pero no salían, se veía como una pareja se iba al pique por culpa de un ideal. De un jodido IDEAL.

Y por eso allí me encuentro en un bar con la cerveza en la mano, viendo una Alfa girada mostrando su jodido color naranja pidiendo pelea, y en esos momentos, recuerdo como se levantaría y le daría un susto de muerte, luego reiríamos. Dejo la cerveza en la mesa y pongo mi mano en la cabeza frotando levemente la cara, intentando borrar recuerdos de un pasado que no logro entender como se estropeó, y que aun y que el tiempo pasó pude ir manteniendo viva mi llama, y que no sé nunca como las cosas continúan como se devalúan. Y al compás de la Naranja Mecánica mi sonrisa skin vuelve en forma de vela.

miércoles, 28 de diciembre de 2011

Yo admito que no sé amar, que no sé querer, que por mucho que lo intento no puedo volver a cerrar los ojos confiando en unas manos que no conozco. Para mi desgracia estoy dejando escapar algunas estrellas fugaces que me caen como regalos del cielo. Puedo gritarle al mundo que tengo miedo porqué así es, extrañamente se repiten las mismas historias de maneras distintas, estoy empezando a creer en el Karma, aun así no puedo decir que sólo quiero una estrella, y que la querré y amaré para toda la vida y que será única en mi vida, porqué le mentiría a ella y a mí. No se correr otra vez a hacía la misma dirección. Y porqué la gente no puede entender que no les hago daño queriendo, que simplemenente me asusta ese camino que una vez tomé, después de tres años encerrada en relaciones que no me llevaban a ningún sitio por fin me siento libre cual pájaro, tengo alas y puedo volar, veo el mundo entero por recorrer a mis pies, esperando que sobrevuele los grandes campos de amapolas. Y dentro de mí una pequeña muñeca de trapo aun marchitada y sucia atada a un corazón roto no quiere salir, no tiene ganas de volver a empezar con lo mismo, y parece que la vida le da miles de oportunidades, de puertas abiertas hacía caminos quizás llanos y perfectos, pero no quiere salir. Y cómo más intentan convencerla de que el mundo ha cambiado más se asusta y más se encierra.

Y me miro en el espejo intentando buscar el porqué de muchas cosas, si es que no lo hago expresamente soy una amante de lo bello, de la cultura, de la música, de la diversidad, me encanta rodearme de personas con diferencias culturales y de pensamiento para entender un poco más en que trozo de mundo me encuentro. Me gusta rodearme de músicos que toquen diferentes instrumentos entonar canciones al más puro estilo de Lousiana, me gusta andar por la noche por los bares buscando almas solitarias que puedan soltar una sonrisa al charlar conmigo, besos escondidos que no pidan matrimonio. Sé que le hago daño a mucha gente, pero a la vez yo sufro lo que tengo por dentro, porqué no soy capaz de decirle a la gente que lo hago para no sufrir más y sonará egoísta pero ya me he cansado de ser la niña buena que le hace caso a todo, lo hice algunas veces y acabó mal.


Por favor, no me pidáis lo que no os puedo dar, no me pidáis estabilidad, no me pidáis fidelidad, soy tan sólo una alma bohemia en busca de su musa.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Carta al pasado


                                                                                                          26 de enero de 2011
                                                                                                                      Algún lugar.

Querido pasado,

Aún recuerdo esos momentos alentadores en los que juntos conocíamos personas agradables y que nos hacían reír con chistes estúpidos, recuerdo esos besos a escondidas de los amigos, también recuerdo esos conciertos de música Oi! en los cuales yo me llegué a abrir el labio y la cabeza en varias ocasiones. No puedo evitar recordar el pedazo de mi mente que quedó olvidado en algún cajón, ¿te acuerdas de cuando soñaba en encontrar un príncipe azul? Cegada por miles de cuentos Hollywoodienses y princesas Disney soñaba yo con encontrar un príncipito. Al principio pareció que aunque mi baja autoestima no acompañaba a nuestra vida encontramos algún que otro príncipe, y eso que el se avergonzaba de ti en público, y tubo dudas de estar contigo. Pero bueno. Luego lloramos como estúpidas jurando y poniendo al Rock por testigo que no caeríamos en manos de otro imbécil... ¡Ja! Quién nos vio y quién nos ve, una semana tardamos en caer en manos de un Skinhead, con su cabeza rapada, su cara de mala hostia y esos besos apasionados no pudimos luchar contra lo natural. Al principio nos perdimos entre caricias y besos bajo las sabanas que dejaban iluminar toda una ciudad, luego con miedo de volver a tropezar empezamos a tener problemas alrededor, y a cambiar las miras del sistema por otras de más agresivas, corriendo bajo lo establecido, rompiendo la ley, con ganas de hacernos una cresta, cogiendo nuestras primeras borracheras, el amor nos cegó. Era un amor loco pero perfecto, la fiesta era nuestra bandera y el punk nuestro himno, nuestra casa la noche, y nuestra patria la cerveza. Pero junto a nuestras botas caímos en manos de comunistas malhechores que nos corrompieron las mentes y nos hicieron enfrentarnos, empezaron los gritos, los sollozos, las peleas y sobre todo los celos. Nos mataron, nos hicieron perder el conocimiento, peleábamos cada día por asuntos banales y absurdos mientras veíamos como nuestras vidas se escapaban de nosotros calada a calada. Y al fin y al cabo acabamos llorando como siempre, por intentar amar aquellos que no debíamos. Suerte que encontré en esa época turbia un rock-ángel de la guarda, con un aspecto semejante al mío y con quién compartí momentos super agradables, quién me guió y me levantó aunque había caído muy abajo. Des de entonces estuve irreconocible, con mis ansias de comerme el mundo cuando ni tan sólo lo conozco, corriendo arriba y abajo abusando del dicho Carpe Diem, sin duda alguna los epicuros renegarían de mi. Anduvimos buscando un lugar en el mundo sin darnos cuenta de que ya lo teníamos, pero que no lo apreciábamos, hicimos burradas, y nos perdimos con demasiada facilidad, el dolor nos hacía débiles por dentro, y no tuvimos otro remedio que hacer una coraza con pedazos de roca para que por fuera no pareciéramos lo que realmente sentíamos, dolor, opresión, debilidad, sed de venganza, rabia... Una multitud de cosas que sin duda alguna no mostramos al exterior. Y con todo eso conocimos a una de las personas que más trastornaron nuestro mundo, aunque el lenguaje era poco comprensible para ambos aún viniendo de la misma matriz, volvimos a creer en esos príncipes Disney que dimos por perdidos, esas mañanas oyendo su coche y viendo su sonrisa que nos trasladaba a un mundo paralelo. Pero como siempre mi suerte me perdió, mi mente se enajenó y nos volvió a hacer daño.

Queridos presente y futuro, no sé si estoy preparada para amar, me estáis dando armas suficientes aún así tengo miedo, mucho miedo, aunque no lo mostraré estoy aterrada de todo, yo no sé si soy capaz de hacerlo bien, ni tan sólo creo que me lo merezca, y no estoy preparada para volver a sufrir eso seguro. Tengo miedo a lo que pueda pasar, quizás por eso me muestro mezquina y ruda siempre. Pero realmente aunque en algunos aspectos mi vida ha sido realmente buena, no voy a quejarme de todo para parecer un puto emo, veo mi vida muy rara, no diré oscura, porqué seria mentira, simplemente lo veo raro, lo veo des de un mal punto. Me gustaría ser una chica Pin Up capaz de llevar unos taconazos, unos pantalones altos, y camisetas escotadas, lindos vestidos, pero mi inseguridad y la comodidad me hacen un traje a medida y no me veo capaz de dar el cambio. Tengo miedo. No sé cómo cambiar, espero que el tiempo me de seguridad y fortaleza para llegar a ser lo que realmente quiero.



Atentamente, alguien que un día supo quién fue.

martes, 20 de diciembre de 2011

Lienzos

Y aunque entre dudas y curvaturas la vida me estiliza, aún me cuesta comprender cómo debo hacerlo. Pinto sobre un lienzo blanco de nuevo, pero mi mano flaquea, esta vez no quiere hacer sólo una linea recta, equivocarse de nuevo y perderse en lo oscuro. En el suelo varios potes de pintura realzan el color de la lóbrega sala alumbrada tan sólo por una bombilla antigua, y una vieja ventana pequeñita. Al son de una notoria música muy lejana sus ideas se clarifican dejando entrever un bonito corma de colores y sombras, no puedo evitar que entre mis labios se escape una sonrisa alentadora. Bajo el sol de un frío invierno que no acompaña mucho al sentimiento que ahora ya siento, que pinto bajo colores fluorescentes un mural enorme expresando lo que pienso. Un suspiro despacito, una mueca, un beso tardío, nada más que cosas cotidianas que mis pinturas habían dejado de mostrar, una alegría flotante en cada instante, pasar del negro y los paisajes oscuros con miles de rincones perfecto para ser blanco de cualquier embelesamiento. El carmín rojo en mis labios, y un viejo peto desgastado que solía usar cuando en su mente se solía cocinar cualquier ideal. Lentamente me acerco a la ventana, bajo la niebla rasa, se divisa una ciudad tapada por el vivo manto del silencio temprano, un movimiento cualquiera que no este echo en vano. Las sucias manos llenas de pintura se postran en una de las ventanas marcando una pequeña forma. Poco a poco va viendo cómo su alma se engrandece, se hace potente, y aunque por dentro lleve cresta, y cadenas, siente que vuelve a vestir como una princesa. Había olvidado ya los retratos de cuentos de hadas, donde el príncipe siempre salva a su amada, y aún y teniendo una posición bastante escéptica de lo que es real y lo que no consigue rozar una nube.

Y al despertar al alba verá de nuevo su nombre en alguna morada.

lunes, 19 de diciembre de 2011

...

Y sigue lloviendo contracorriente, correré hacia los que no me entienden y me ven mal por ser cómo soy, las ganas de revolucionar a una sociedad mejor me queman por dentro.

¡Adelante todos por un mundo mejor!

viernes, 16 de diciembre de 2011

And where is the love? Suena el repique de una guitarra, las cuerdas resuenan en el hueco de la caja, unas notas arriba otras abajo. No puedo evitar sonreír al ver sus pequeñas muecas en la cara que denotan nerviosismo y tensión. Ninguno articula palabra, el miedo es presente, los dos sabemos que hay algo y que queremos más pero no somos capaces de decir lo que pensamos. Le miro a los ojos y siento un extraño fuego por dentro, hacía siglos que no sentía sentimiento, ese nerviosismo, sin saber que hacer, yo que normalmente soy de las de complacer. No sé explicar que es lo que es, pero el calor que me envuelve cuando pienso en quedarme dormida en su pecho o sentarme en su regazo me hacen volver a sacar los colores y verlo todo rojo y con muchas flores. Siento que casi no puedo respirar, el nerviosismo me invade y es que des de que mi alma quedo fragmentada no fui capaz de sentir nada, y ahora como si saliera de la nada va y me vuelve a dejar colgada. Soy consciente de que no soy una princesa de cuento de hadas, no llevo vestidos rosas ni tiaras, mucho menos yo soy fina cuanto más me conoces más ruda me vuelvo, y todos acostumbran a asombrarse de mi pelo corto, quizás soy punk, rockera o metalera, no lo sé del todo cierto pero digo que aunque no aparento lo que voy siendo cuanto más me conoces más te muestro lo que yo ya siento. Y en una fría tarde de invierno mis esquemas se rompen, no doy pie a lo que dicen nuestros corazones, en nuestras miradas sólo se encuentra el reflejo del alma, nuestras palabras que escasean debido a su fragilidad salen directamente de nuestros corazones una vez rotos, que por vicisitudes del destino parece que pueden volver a recomponerse. Y así entre largas noches en vela pensando qué es lo que me estaba pasando me doy cuenta de que me estoy colgando. El miedo que se había echo presa de mi cuerpo antaño esta vez desvanece con un sólo beso que cuando lo recuerdo lo extraño, me supo tanto a descanso y felicidad que quiero docenas de ellos para volver a saltar. En su mirada una extraña connotación me sobresalta hacía tiempo que sus ojos no habían mirado así a una mujer, y la última le había roto en pedacitos lo que era. Y con el paso de las horas fugaces entre nuestras manos, a contra viento conseguimos encontrar un espacio para meternos, para ir pensando que es lo que diremos, y por encima de todo nuestras almas descansan tranquilas.

Al llegar a casa cogí aliento y suspiré y una sonrisa estúpida se escapo de entre mis labios, haciendo arraigo a lo que de nuevo se me venía, alguien que quizás me trataría como me merecía, que se acabarían los gritos por tonterías y las prohibiciones. Y ahora ya no puedo dejar de sonreír porqué he vuelto a ver el sol salir, y espero que sean muchas lunas las que nos acostemos a su vera, y que aunque yo no sea ni la más femenina, ni la más cariñosa sin duda mi corazón ahora me pide otra cosa. Y me doy cuenta de que fugazmente mis palabras se han vuelto bonitas que haciendo caso a los consejos de mi amiga de dejar de besar a ranitas, quizás ahora algún día oiga de nuevo un te quiero y pueda volver a escribir que tanto el sol brilla, aun que el día esté nublado.

jueves, 15 de diciembre de 2011

Vive

No descansa el alma condenada, que vive atrapada en una jaula acristalada, sus sollozos y sus gritos no se oyen debido al material del cubículo en el que se encuentra encadenada, de manos y pies obstaculizando cualquier movimiento provocando la caída repentina, así pues en sus ojos de marrón revestido ahora sólo se pueden ver lágrimas negras que caen sin cesar. Grita, y vuelve a gritar, esperando una ayuda, un socorro, un auxilio. Amante de aquello que lo hace todo bello está condenada a no ver lo que hay a su alrededor, y a volverse loca lentamente, cada día un poco más. Enloquece con el paso de las horas y de los minutos, busca un rincón en su lúgubre cela para respirar hondo y volver a intentar el salir de ese maldito sitio endemoniado que la hace presa de sus pensamientos des de que el tiempo es tiempo, abandona pues así todo intento de volver a resurgir, de que sus alas se extiendan y volver a volar, porqué por cortar, le han cortado hasta la libertad. No sabe como expresar lo que siente ni cómo se ve, y decidió volverse sirena y ponerse a cantar y rebramar, en lo que la experiencia le dice que busque otro camino para decir lo que siente aunque este este perdido. Quiere encontrar su musa y busca en el suelo algún objeto para que le de un simple deseo. Habita en su corazón la fuerza de la voz y de la melodía dándole un silencio que acuna las lagunas de su mente.

Y empieza el dulce recital de una voz al despertar, junto al alba surge su encandelada alma, sus besos robados, sus caricias perdidas. Aunque el silencio termine y se vuelva cuanto menos agradable rompiendo los estridentes alaridos que enunciaban su pena y su condena, ahora son anunciados con más gracia, suenan al son de un saxofón, su fuerza e intensidad rompen las barreras de lo nunca visto aunque sólo sea en su cabeza consigue romper las paredes de lo que no está escrito, de esos sentimientos que le hacen quebrantar el bramido del negro mar bravío. La luna le acompaña en su camino para de nuevo encontrarse a su imaginación rondando vistiendo un verde y colorido, esta le mira y le coge de la mano, la lleva corriendo por un pasadizo todo aterciopelado, su piel desnuda siente el sosiego de las caricias de algo nuevo, algo que había olvidado... Y finalmente llegan a una sala toda decorada, con miles de matices de colores, y sus pupilas de dilatan como habían echo antaño regalando a su cerebro miles de mezclas. 

Y en su dulce cuerpo vuelve a florecer la vida lentamente.... 

martes, 25 de octubre de 2011

Mi cajita de musica.

Un impecable olor a café recién echo se abalanzaba sobre mí cuando el camarero del céntrico café de Londres se disponía a llevármelo. Con él un pequeño trozo de papel con un número de teléfono escrito, y su nombre: James, con un smylei sonriente. Me regaló una preciosa sonrisa un típico chico londoniense, rubio, ojos claros, tez blanquecina... Me recordaba levemente a alguno de los vampiros de las películas adolescentes. Le devolví la sonrisa, en mis labios rojos se dibujo un perfecto arco el cual no regalaba a cualquiera, el chico entró a la cafetería mientras yo observaba atentamente a la gente que pasaba delante de Bervedere Road, algunos iban para el London Eye, para contemplar las magníficas vistas que este presentaba de la ciudad. Admiré a un grupo de chicas que pasaban hablando sobre los chismorreos del momento en el instituto, que si habían estado con varios chicos, recordando lo nerviosas que estaban por el baile. Me hubiera encantado ser ese tipo de chica durante esa época de mi vida, pero la vida me llevo a tomar otros caminos, y en esa época yo pensaba en cambiar el mundo, en las revoluciones, en tatuarme cosas extrañas en llevar la contraria. Dulce adolescencia. Estaba sentada con las piernas cruzadas, con un vestido negro y unas botas, y un abrigo colgado del respaldo de la silla, mis gafas de sol estaban sobre la preciosa mesa de mármol blanco del café, y siguiendo mi habitual ritual vertí sólo un sobre de azúcar en en el café. No me gustan las cosas muy dulces, lo prefiero todo un poco amargo, le da un sabor más intenso. Por fin le vi llegar, apresurado como siempre, parece que se lo lleve el tiempo, nunca sabe donde vive ni donde va. Iba con su traje y el maletín, su pelo negro le daba un toque un tanto glamuroso que quedaba perfecto con su corbata púrpura aunque como siempre mal colocada. Me levanté para saludarle como es debido, como siempre había echo des del mismo día que empecé a salir con él. Me acerqué a él y como siempre me rodeó con sus brazos mientras me daba un suave beso en los labios, mientras yo le colocaba la corbata.
-Hola cariño ¿Me has estado esperando mucho?- me dijo con su cálida voz que tanto me reconfortaba, que siempre le había echo especial-Siento el retraso, te lo compensaré.
Con mi cariño habitual a la cual él ya estaba acostumbrado le respondí. El sabia que me gustaba mucho demostrar mi amor aunque fuera de una forma elegante: - Tranquilo, estoy acostumbrada a tus retrasos horarios- le sonreí mientras acababa de ajustarle el nudo- No hace falta que me compenses nada, sólo la próxima vez arréglate el nudo de la corbata.
-Tan perfecionista como siempre, nunca se te escapa ni un detalle de nada- se sentó y levantó la mano.
Esperaba ese momento des de que James, el camarero, se había acercado a mi con la nota con su teléfono, esperaba impaciente a ver su expresión de decepción, o de sorpresa. Se acercó a él y me miró como diciendo; "¿En serio? ¿Con este tío?". No pude evitar soltar una sonrisa escueta. Mientras él me miraba. Me preguntó si me pasaba nada, a lo que respondí negando con la cabeza. Acto seguido empezamos a tomar el café juntos. Las cinco en punto, nunca nos había gustado el té.
-Bueno hoy en la oficina...-empezó a hablar pero le corté, odio que hable de trabajo conmigo, sabe que conmigo puede compartir mucho más que simples cosas de trabajo.
-Eh...Para, para. Ya sabes que conmigo está prohibido hablar de trabajo. Hace siglos que no me hablas de música, tu adoras la música. ¿Porqué ya nunca me hablas de ella?- le hablé con el corazón abierto. Ahora que lo pensaba más poco a poco, era cierto, des de que dedicaba tanto tiempo al trabajo no podía hacer lo que más le gustaba, tocar la guitarra, componer...
-¡Oh dios! Por favor Angie hemos hablado mil veces de ello, trabajo duramente para poder avanzar en la empresa, me encanta la música, pero no tenemos tiempo, somos adultos.
-¿Qué? Perdona Jack, la música era tu vida. ¿Cuánto hace que no vamos a un concierto, al teatro o a una galería de arte? Yo vivo con mi arte, pero tu lo has abandonado-le dije muy enfadada era un guitarrista realmente bueno, y no quería que nuestra vida fuera sólo trabajar, y trabajar.
- Vale,vale- me respondió con miedo, en sus ojos aún podía ver la melodía de su alma ese calor intenso que le abrumaba cada vez que oía a hablar de su música- Mira, mañana que es sábado nos levantamos temprano, subimos al desván, recuperamos mis guitarras y todo nuestro arsenal musical, por la tarde tocamos juntos, por la noche vamos a cenar y a un concierto. ¿Te parece bien? -contestó sabiendo que me hacía feliz.

Al día siguiente oí un despertador a primeras horas de la mañana, tanto empeño le había puesto a lo de la música que me puse contenta de que por fin fuera a ser feliz, y más después de mi estrategia para darle la noticia. Oí ruidos muy estridentes y subir y bajar, tal era el ruido que al final me tuve que levantar. Fui hacía el despacho donde solía hacer su trabajo, estaba totalmente re modelado. Dónde antes había un escritorio con muchos papeles ahora sólo había sus dos ordenadores, donde habían las estanterías había todas sus guitarras bien colocaditas, también nuestro viejo micrófono con el que habíamos cantado antaño, de estilo retro. Yo me encontraba en la puerta de la habitación alucinando, había pintado la pared de color verde. Jack llevaba unos tejanos sucios, llenos de pintura, y una camiseta de propaganda también muy sucia. Vino hacía mi, y me abrazó por detrás.
-¿Te gusta? Quiero que sea tan preciosa cómo tu pero eso no puedo conseguirlo es demasiado difícil para mí.
No pude articular palabra y simplemente le besé. Y me dispuse a ayudarlo.
Después de pasar toda la mañana trasteando todo lo que teníamos en el desván conseguimos arreglar la habitación para que quedara totalmente musical. Luego nos tumbamos al suelo, con un bol de nachos con queso mientras tocábamos la guitarra y cantábamos a la par. En un momento dado se puso a tocarme una canción que me compuso cuando sólo teníamos diecisiete años. No pude evitar llorar. Y al terminar la canción se acercó a mi y me preguntó que si me había gustado.
-Nos ha encantado.
























martes, 18 de octubre de 2011

Lleno de gloria.

Entre el cielo busco un agujero dónde esconderme que ni el sol ni las estrellas sean capaz de verme. De perderme entre la turbia noche en algún garito y salir de él vistiendo un pequeño corazoncito. Esperando que suene una guitarra en el fondo de mi alma, para sentir de nuevo tu mirada, buscando un amante de lo bello para que me acompañe y nunca me deje. A veces siento que me ahogo que no puedo más que me miro y sólo sollozo, que mis gritos ahogados se pierden en el vacío del mundo, que nadie los encontrará jamás que yo ya estoy perdida. Oigo el amanecer postrándose ante mi, y con una reverencia alabo su llegada cual atónita me deja al ver que nunca hubo madrugada.

Mis botas van pisando fuerte, un paso luego otro, recorriendo un largo camino que no lleva a ningún sitio, siguiendo una luz que me guía que me lleva más allá de lo que puedo ver, y de entre la penumbra surjo yo, te miro a los ojos y te digo que no llores que no vale la pena llorar por un sueño roto, mientras yo cada día grito, y golpeo la pared en busca de canalizar ese miedo que llevo por dentro, porque soy incapaz de decirle al mundo lo que siento. Que me gustaría tener alguien que me abrazara por las noches y me dijera que deje de llorar que yo me puedo levantar. Pero eso no va a ocurrir, no porqué no me amen, si no porqué soy tan exigente que voy a dejar pasar media vida sin darme cuenta de quién la habita. Aun huelo el recuerdo de su pelo, anhelo su suave melodía, su desplante descarado, echo en falta eso que me complementa. Y puede que sólo sueñe con contarle a la luna mis pesadillas mis horrores en los que me pierdo cada noche, que no llevo vestido ni tacones, que voy descalza aplastando corazones, y siento que me quemo des de dentro que no quiero avanzar ni un paso más para no volver a lamentar ni un acto. Me siento en un banco y me miro las manos llenas de tajos de tanto intentar cortar el viento, miro mis ojos vacíos con un marrón desgastado parecido al de un viejo baúl olvidado, mi cuerpo magullado por el dolor que me hago cada vez que me miro, que sólo fue una vez que intenté cometer alguna estupidez. Empezar a correr hacía los rosales no para admirar su belleza si no para sentir sus espinas como se clavan en mi cuerpo porqué cualquier dolor es menor al que me produzco cada vez que me miro. Como odio llegar a este punto en el que no sé si vivo para coger tu mano y alzarla para que no se queme mientras yo ardo en la tierra, quiero elevarte al cielo porqué eres un ángel.

Empieza a llover y estoy en medio de la calle esperando. ¿A qué o quién? A nada ni nadie, sólo espero que pase el tiempo, que la lluvia roce mi piel, que pueda notar la humedad, poder sentir de una vez aunque sea leve, aunque sea difícil, aunque no sé si ir hacia delante o hacia atrás, que espero no caer más en el camino porqué tengo las rodillas peladas de tanto caer y llevar pantalones cortos. Que siempre he sido la sombra de alguien, que nunca me han reconocido nada, que nadie sabe como canto, como pinto, como fotografío ni tan sólo como pienso porqué aunque no lo parezca, soy como la sombra de Peter Pan, que está atada a él aunque tiene ganas de huir. Poder amar de nuevo otra vez algún día y dejar de ser una princesa perturbada.

jueves, 13 de octubre de 2011

Pero es que soy tan tonta cuando quiero, cuando no quiero darme cuenta de que estás ahí pero por una absurda capullada mía tengo la cabeza totalmente fuera de lugar. Qué no soy capaz de ver que en el chocolate de tus ojos se esconde la más bella de las ternuras, y que contigo me siento princesa de nuevo aunque había perdido la corona y las botas.
No sé que camino tomar, pues siempre estoy flagelandome con infamias banales que no me llevan a ningún lado, y doy vueltas sobre mi misma, y miro al rededor y sólo veo campos de amapolas todas rojas, que me gritan des del suelo que suba un rato al cielo. Y con matices grises no descarto que algún día deje de lado al escarnio, y vuelva a la sobria madurez que tanto me reconfortaba, ese manto dulce y sedoso que no puedo quitarme de la cabeza. Al igual que sus ojos entre mis venas. No es uno más, es él. Y sigo sin darme cuenta de que mi príncipe llegó con un corcel blanco y sin duda aun me veo con las lágrimas colgando. Y con mi vestido morado con algunos toques de negro pastel, roto y descosido, en semblanza de mi alma que busca alguna aguja que lo cosa y le de brillo para volver a oír el agua bajar por el río. Y sonreír cada mañana al alba cuando al lado en mi cama pueda acariciar tu aterciopelada cara poder besar tus labios rojos y carnosos, y jugar entre tu pelo mientras te pierdes en mi pecho. Dejar de llorar por los rincones y ir buscando algunas flores, que me den ese color que necesito...¡Ese verde, ese amarillo! Romper las reglas que salen de alguna antena, correr por las calles cogida de tu mano intentando tocar el aire mientras por los rincones tu te escondes. Y mientras yo te busco sonrojada escondido de entre algún busto aparezcas tú de improvisto y me sorprendas con un anillo. No para comprometerte si no para demostrarme una vez más que soy princesa de algún reino y que donde me alcance la vista es todo lo que tengo. Siento que te tengo que te toco que te palpo, entre mis manos cuelga el vestido morado que llevé ahora llevo uno verde y tan contenta que me encuentro.
Ciertamente vencí al miedo queriéndome a mi misma, pero esto sólo es ficción escrita. Que me deja divagar a mi aire sin nadie que me estorbe.

Y como siempre esto no tiene final feliz porqué no existe, sólo tiene un final que intentará ser lo menos desagradable posible.

Y aun qué creí ser princesa de tu reino sólo soy una fulana de cualquier esquina, que hace cualquier cosa por una propina. Por un céntimo de amor, por un euro de cariño. Todo el que tu por egoísta y "machito" no me diste. Porqué creíste que era más sencillo huir de mi y esconderte en tu vida hasta que no pueda tocarla. Pues a mi me cansa ser la puta de tu almohada, que no te besa cada noche y que sólo te ve con otras mujeres, porqué tengo mis derechos y mis sentimientos, y no seré la más guapa, ni la más sexy pero te aseguro que de inteligencia a todas les saco media cabeza y que si hablamos de cultura dudo que sepan quién es Delacroix y ni tan sólo que es el Pop Art. Así que si algún día decides sentar la cabeza y venir a buscarme igual ya no estoy igual he encontrado otro mundo en el que sea más feliz. Incluso quizás cuando te des cuenta, yo ya habré muerto. Esto no es una burda broma macabra, sólo son los sentimientos de una dama un tanto agobiada.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Qué no por sonreír se es más feliz, qué mi alma cuelga de una cuerda y tu la tensas. Pues hasta el cuello la tengo esperando una señal, no tiene porqué ser carnal. Sólo con una mirada a mi me bastaría, para saber dónde llegaría. Qué mis sueños se pierden en la estela de tu aliento. Si es qué por quererte yo quisiera que me quieras que yo te quiero sin querer.

jueves, 22 de septiembre de 2011

No me hago artífice de los efectos secundarios que esto pueda tener. Es mera crítica personal. Mis inquietudes, mis obscenidades, lo que al fin mi mente sucia piensa.

No soy más que el resultado de dos personas. Cierto. No he elegido mi cuerpo, no he elegido mi forma de ser, ya que se ha ido creando. Si que he elegido mis pensamientos, y pienso que todo esto es una gran farsa, o que alguien ha sido lo suficientemente listo cómo para engañar a miles de millones de personas y huir como si nada. Aún pudiendo entrar en temas políticos, y como siempre afirmo, no lo voy a hacer ya que no se me da nada bien hablar sobre política, mi campo es otro que todos los lectores de mi blog conocen y probablemente aborrecen ya. 

Todo esto empieza en lo que viene a ser mi yo, no es más que una opinión según mis experiencias. Andaba yo con un par de compañeros por el centro de una gran ciudad, nunca he sido chica de altas autoestimas, así que como de lógica mis amigos intentaban darme una visión más positiva de la vida. Intentos frustrados como siempre, en la conversación yo les preguntaba que en que se fijaban de una chica ( uno de ellos tiene diecisiete años y el otro veintisiete), el chico de diecisiete me contestó que evidentemente en el físico siempre y que la mujer fuera proporcionada, también en sus ojos, labios y demás atributos. El chico de veintisiete, un grandissimo amigo mío en quién confío más que nada en este mundo me contestó con unas sabias palabras:  "Mira Yaiza, te digo por experiencia propia que no te puedo negar en que evidentemente me fijo en el físico de las mujeres, pero como hombre que soy y muchas mujeres con las que he salido te digo que todos vemos a una chica en su perfección cuando nos enamoramos de ella, y para nosotros es perfecta pese 150kg como pese 40kg porqué la amamos y siempre vamos a estar a su lado. Nos gustan sus labios, sus ojos, o sus curvas, pero nos enamoramos de las sonrisas que nos regaláis cuando más las necesitamos, de esos gestos de amor que tenéis hacía nosotros, cómo nos cuidáis, de vuestra preocupación absurda cuando pensáis que nos ha pasado algo. Nos enamoramos de la ternura y el cariño que desprendéis y sobretodo de esa inocencia que aun con el paso de los años no perdéis y que tu, aunque no lo creas, tienes más que de sobras para enamorar a un hombre Yai. Sólo con tu mirada y tu manera de hacer, tan inocente, tan bondadosa cuando demuestras a los demás lo preciosa que eres, lo que disfrutas con pequeñas cosas. Esas cosas te hacen especial, y aunque sé que esto te lo he dicho millones de veces Yai, quién se enamore de ti se llevará el premio gordo, y te lo digo porqué sabes que yo te quiero."
Fueron las palabras más bellas que había oído hasta el momento.
-Jey, eres un cursi- soltó el otro.
Le miró y sonrió.

Este es puramente un texto que pretende darle las gracias a uno de mis mejores amigos, a la persona que más amo como amigo y que espero nunca, nunca perderle. A quién doy mis felicitaciones porqué va a ser papi, igual que a su novia Débora.


miércoles, 31 de agosto de 2011

Verano

Al empezar el verano nunca llegué a pensar que seria tan movidito, por así decirlo. La verdad es qué no lo empecé con buen pié, y en seguida las lágrimas ocupaban mis ojos marrones a lo que mi padre siempre me dice que de tanto llorar se me harán los ojos bonitos, y a estas alturas los debo tener preciosos. Podría cagarme cómo hago habitualmente en la sociedad que nos rodea, en sus mierdas de estereotipos o quizás en otras cosas que no vienen al caso y que sinceramente me hierven la sangre. Pero en este verano repleto de aventuras prefiero ir hablando de lo que viene a ser la superficialidad de la apariencia y lo engañados que esta nos tiene. Todo esto viene a lo que ido observando de mi alrededor y las conclusiones que he sacado, más buenas o más malas, más o menos acertadas, pero alego de nuevo que es mi punto de vista y que mi intención no es hacer pensar cómo yo si no incitar al pensamiento propio.

Antes de empezar mis explicaciones quiero hacer especial atención a una frase que el otro día un buen amigo mío me comentó y que podríamos usar en cualquier momento: "...aunque parezca mentira y todo el mundo se dedique a juzgar la forma en como nos vestimos y nos peinamos los grandes ladrones de este país y de todos van de traje y corbata y visten los mejores zapatos italianos.". Sin duda alguna una frase con mucha razón y que podríamos aplicar a tanta gente de nuestro alrededor. Yo que soy una persona bastante observadora des de mi burbuja mental he llegado a la conclusión (que todo el mundo sabe pero que a mis diecisiete años tiene su mérito o no) de que todos los jóvenes, tanto los de hoy como los de antes vivimos en modas más o menos iguales. Al fin y al cabo nosotros mismos no hemos podido vivir esos sentimientos de revolución o libertad que tuvieron nuestros padres o abuelos, quiénes vivieron guerras y represiones muy fuertes en las que tuvieron que vivir. Hoy en día todos los jóvenes o la gran mayoría viven en Staus Quo perfectos y sin ninguna estría en su vida, obtienen los deseos que quieren, aparatos electrónicos, libros (pocos), coches, carreras, lo que ellos quieran en la medida en que sus padres con muchas más complicaciones se labraron futuros en los que probablemente estaban destinados a vivir siempre en la miseria, pero no, dieron una lección al mundo y sacaron empresas, trabajos adelante y ahora nosotros vivimos de ese cuento para refugiarnos en frases cómo: "eran tiempos diferentes". A lo que yo digo verdad, pero a la vez excusa mala para no trabajar en un McDonal's ocho horas y estudiar por las noches,si se tiene que hacer se hace. Yo soy partidaria en que si puedo encontrar un trabajo en la Universidad para ir compaginando con mis estudios eso supondrá una primer toma de contacto con el mundo laboral, con el esfuerzo que eso significa y con la evidente jerarquía que preside en las empresas capitalistas. A lo que no excuso que seamos todos un rebaño de críos insolentes que se creen unos sabelotodos y que creen que por haber leído un libro de Mark Twain son más cultos, a lo que la mayoría de ellos no saben ni tan sólo quién es ese Mark Twain. Y de ahí podría sacar miles de personajes históricos que ni la mitad de adolescentes conocen y que yo en el campo musical, literario e histórico le debo el conocimiento a mi padre y a la curiosidad que siempre me ha causado el saber más del pasado y sobre todo de las personas triunfadoras. A lo que digo: madres y padres (pero sobretodo madres) de este codicioso mundo, si vuestro hijo u hija quiere teñirse el pelo de un color estrafalario, quiere cortarse el pelo o dejárselo largo a lo Kurt Cobain, o quiere hacerse un piercing en el pezón dejadle en paz y que lo haga, es una estúpida moda que pasará con los años, vosotros pudisteis ser punks, hippies, revolucionarios y pijos,y nadie estuvo de acuerdo con eso, pues nosotros ahora sólo podemos refugiarnos en esas modas que ya pasaron y seguir adelante con las estupideces que todos cometemos, diciendo que queremos ser heavys o tener nuestro propio pensar sin dejar de ser críos a la vez.

En fin, suerte tengo de vivir en un mundo que me permite tanto a la riqueza, tanto del saber como del ser.


domingo, 7 de agosto de 2011

Killing me slowly


There's something inside me that is killing me slowly. It is not a drug, not alcohol, is not a disease, is a feeling. From the first moment I felt this sudden pain inmy heart I knew it was going to be lasting, it was not any pain, it was not aheadache or a stomachache, not even the flu. I knew it was pain in the soul, in my little heart and my head. Gnawing inside me, I rust, makes me feel a social wastewhich is not at that point I am. At this point I would have to feel one of the world'sluckiest woman in the world, but why not look in my mirror and cry. I see in me anaberration, something terrible that nobody wants, who has been kicked out ofthousands of lives by their appearance, and is judged harshly by everythingaround him. I can not help that I do compare myself with all the girls are with me,and I can not see me up to no. I've always just been different in many ways, I lovelong talks about Stephen Zweig or discuss a picture of Andy Warhol, I like reading a novel while watching the rain, playing video game, watch movies likeWest Side Story, Moulin Rouge Mogambo, admire the beauty of the Pin Up, asAva Gardner, Marilyn Monroe, Lana Turner and Grace Kelly. That envy at the thought of the radiant beauty of these women, and the strings they are handcuffed continuously day by day. Is inevitable to feela freak in a society "Cani-poligonera" which looks only at the outer beauty. I can not show all my hate, because it all seems little. I have not enough words for Express hatred I feel towards those who admire the beauty androgynous women.I find it abominable.

Anyway, the story came not like taking pain inside is killing me, try it out with music, living each moment the note singing, saxophone feel inside, that the bluesmuse hidden after my curls after my shame, after my fear of failure or lost on the road. The fear of not learning enough to not reach far enough, the fear of not being able to move in a straight line. The fear of myself.

I probably would not know enough to say whether or not I have qualitiesdepending on things, but I'm sick of hearing comments like "she's better than you on that."In this and many! I have it clear that I am not your wife, perfect kids, butstrive to read between the lines, because the contempt for yourself is the mostdestructive that can be. I strive every day to find that inner self that no longer worries that if size 38 or 42,but who wants to take care of their physical health more than anything, that you can find a guy to talk, you love me for who I am and not what they say I have to be. And i accept reality as it is.

miércoles, 22 de junio de 2011

Reinas de corazones


No hay más que andar por la calle para ver esas caritas iluminadas de los escolares al sonar el último ring del año. Posiblemente felicidad parcial para aquellos que tienen que hacer deberes en verano, pero ahora que se acerca temporada de operaciones "bikini", época en que los muchachos pasean por la playa mostrando sus musculados cuerpos trabajados durante el año me viene en mente la dulce canción de Alice Cooper "School's Out" sin duda el hecho de ser un metalero que escribió una canción haciendo referencia a esa ilusión que tenemos todos al acabar las obligaciones y empezar a tomar el sol dijo mucho a su favor. Aún así no puedo evitar pensar en el lado más "oscuro" para así decirlo del verano, ya que en verano parece que la sociedad está fijada en cómo tienes la barriga o qué tal te queda el bikini. Siempre he sido una efímera sombra que se mofaba de eso y que la importancia física no la tenia en cuenta, hasta hace poco, me siento totalmente desterrada de mi mente cuando en ver a alguien hago un esquema mental de la posible perfección de su cuerpo o cómo mejorarlo. Sin duda me estoy volviendo una obsesionada con los cuerpos en su grandeza. Aún así nunca me he considerado una chica sex simbol, con lo que preferiría hablar de las grandes mujeres como Ava Gardner, Marilyn Monroe o la preciosa Queen del moviemiento Pin Up, Bettie Mae Page. ¿No podemos fijarnos en otro tipo de mujer que no sea una chica raquítica con problemas para andar y que coma un manzana diaria? Siempre he preferido ser una chica algo más voluminosa que no un esqueleto, aún así es difícil aguantar las duras críticas que no siempre tienen que venir en forma de insulto, muchas veces vienen en otras formas, ya sea des de un " si no estás mal, pero..." maldito pero siempre aparece en el peor momento, a todas las chicas nos gusta saber que somos atractivas al menos para un colectivo de gente, porqué si los hombres quieren sentirse machos y guapos, nosotras queremos sentirnos de vez en cuando reinas de corazones, rompedoras de almas. Pero bueno nos conformaremos con ser chicas Still Loving You (balada preciosa de los Scorpions) que miran des de detrás de un cristal cómo poco a poco su amor y su autoestima.

Y para acabar me gustaría retratar que en este loco mundo en el cual aunque no lo parezca y mirando el reloj del siglo XXI las mujeres seguimos siendo objectos de deseo sexual masculino al cual nos vemos reflejadas y que nosotras mismas nos dejamos someter, por qué si no fuera así a ninguna le importaría tanto el bikini, ni cómo coño estoy yo más "buena" aplicándolo como termino totalmente subjetivo, somos esclavas de nuestras mentes cosa que nos hicieron pensar los hombres y entre todas tenemos que ayudarnos a ser más independientes moralmente nadie necesita un hombre para poder brillar, somos como pequeñas estrellas que creen que un trocito de cielo es mejor para brillar, pero para que quiero yo sólo un trozo si lo puedo conseguir entero.

Be girl, be yourself, with your virtues and your flaws.

Lill' pinup babe.

Esclava

No quiero ser esclava de mis acciones pasadas pues muchos errores cometí pero por ello no voy a llorar más a mi no me va eso de sentirme mal. Estoy cansada siempre de la misma historia: "eres mala", ellos me dicen, que coño sabrán ellos que con agua bendicen. Me tenéis hasta el c*** de vuestras gilipolleces ¿a caso pensáis que soy tan gilipollas? Con vuestras memeces me despojasteis de toda credibilidad ahora voy a ser yo la que rompa vuestras caras con una botella si os veo. ¿No os cansáis de hacer mi vida tan complicada? Intento ser buena persona y amar, pero por lo visto eso no me está permitido, por lo visto no me puedo enamorar porqué me esclavizáis y no me dejáis avanzar, yo sueño con luchar y con llegar a mi meta y vosotros sólo hacéis que tirarme para atrás. Pero ya me he cansado de ver vuestras caras alegres pienso tirar mi vida adelante aunque eso me cueste mucho porqué ahora mismo me es casi imposible, pero estoy ya harta de estar presa de mi cuerpo y de vuestras mentes, porqué hay mil cosas por las que puedo llorar, puedo echarme atrás y renunciar pero yo prefiero no ser esclava de mi pasado si no pionera de mi futuro.

lunes, 20 de junio de 2011

Oxido nitroso

La pesadez de una situación muchas veces te oprime para seguir adelante y ser el dueño de un pensamiento que a veces infecta hasta la propia mente. Qué arduo el pesar que uno puede llegar a soportar... Sin duda a veces me miro al espejo y sólo veo una masa con algún que otro atributo positivo, pero sin duda muchos de negativos. Es muy pesado oír noche y día lo horrible que es vivir con una persona cómo tú y lo fácil que era antaño cuando eras domable como un cachorrito, pero mi mente me intenta evadir de todo eso. Pasar por un momento en el que sólo quiero huir a un mundo lejano, a otro país a un sitio dónde sea yo con mi cabeza, volver a empezar olvidar y quitarme toda esta mierda que llevo encima. Sueño con una ciudad dónde renacer y volver a crear un mundo interior. Actualmente hablo de válvula de escape cuando hablo de música, cantar me hace sentirme bien mostrar mis sentimientos encima de un escenario me hace mostrarme tal y cómo soy, pero igual no tengo talento para eso, bien creo que no tengo talento para nada... Y no alimento mi baja autoestima de falsas esperanzas o de recovecos de mi cabeza- que también- si no que lo alimento de palabras necias que inundan mi hogar día sí, día también y que vuelven como puñales asesinos con ganas de sangre a mi corazón cada vez que me atrevo a articular una palabra aunque sea para dar mi opinión.

Lamentablemente cada día que pasa es un tormento en mi mente, me siento encerrada en una especie de cárcel de cristal de la cual no puedo salir por el miedo a que vuelvan a hacerme daño y que aun que quisiera no podría salir porqué mis convicciones me lo impiden, algo en mi mente me daña constantemente un pesar, un mal estar, que no se va, que no tiene cura aparente y que me mata cada día lentamente. No dejo de soñar con ese mundo perfecto en el que podré leer sin que eso sea un motivo de burla, en el que podré escuchar un buen jazz o un buen vinilo de los Dire Stratis o Jetrho Tull sin sonar arrogante o intelectual, que podré alimentar mi mente con perfectas fotos de locus amoenus o podré escribir con un papel y un lápiz, ¿dónde se encuentra ese sitio donde puedo ser yo? Aun lo busco y no se si algún día lo encontraré porqué ya no se quién soy o quién debo ser a quién le debo mis acciones o si el hecho de pensar por mi misma me cohíbe de ser lo que habrían deseado pero a que puedo referirme si no cómo a un oxímoron de mi propia existencia en que la esperanza es alimentada por lo terrible lo dudable lo pasionalmente perfecto. Ya no se hacía donde apunta el Sol o a quién miran las estrellas.

jueves, 26 de mayo de 2011


Fue un tiempo turbio lo admito pero ahora todo está mar en calma.

Qué más puedo pedir que sonreír y perderme en tu mirada, en tus ojos verdesmarrones, sentirme segura en cada abrazo en cada beso en cada carícia, perder el norte entre las sábanas de tu cama, y despertar por la mañana con tu eterna mirada, no quiero perder lo que tengo, lo valoro y lo quiero para siempre, en su imperfección me hace sentir la mujer más amada de este mundo, no quiero que nada ni nadie nos separe, por errores cometidos y por cometer. Sé que nuestro amor es perfecto a su manera, y es la que a mi me gusta; porqué me gusta verte disfrutar, porqué me gusta verte reír, porqué aún siento mariposas en el estómago cuando voy a verte, porqué cuando te veo mal hago lo que sea para verte reír... En fin, sólo quiero expressar parte de mis sentimientos ahora, que són perfectos ídilicos el paraíso, siempre he puesto cosas pessimistas, denigrantes , y feas pero ahora sí AHORA VOY A SER FELIZ...

lunes, 4 de abril de 2011

Princesa de nada

Soñar, soñar... Un momento, un instante, hace que tu vida cambie al completo. Solía yo llevar un jersey de la marca Vespa negro y rosa, intentaba convertirme en esa princesa tan idealizada por el hombre, esa mujer rubia, con los ojos claros y un largo vestido rosa, encerrada en una torre, esperando a que llegue un príncipe con un corcel blanco a salvarla... ¡Bah! Paparruchas... ¿Por qué esperar? ¿Por qué intentar ser una princesa? Ya me cansé hace tiempo de ese cuento absurdo con el que nos bombardean des de que somo pequeñas. Decidí ser princesa de mi propio reino. Llevo unos tejanos rotos, y unas converse rojas desgastadas, me abrigo con una harrington negra, toco la guitarra eléctrica, canto y escucho punk... Soy el tipo de chica que ninguna suegra quiere para su hijo, llevo el pelo corto y llevo una dilatación, fumo marihuana y bebo cerveza, me gusta el fútbol y jugar a la videoconsola. Soy una chica mala, me gusta el sexo, sí, como un café, bien fuerte y encima de la mesa de la cocina. Todos los hombres se giran cuando me ven pasar, no les doy riqueza, ni belleza externa, no me maquillo, les doy lo que quieren, les doy amor, pasión, les doy sexo, les llevo a las nubes de un golpe, y les bajo de otro. Tengo un amor en mi corazón, sólo existe él. Es un chico malo, me mira por encima y eso me pone mucho. Es moreno con el pelo casi rapado, lleva una harrignton negra, con pitillos y botas. Simplemente decidí dejar de ser la chica buena a quién siempre le pegan hóstias, decidí empezar a soñar por mi misma, no pensar en el dolor que causo, simplemente en mí, porqué en este mundo tan egocéntrico ¿Qué daño hace uno más?

jueves, 10 de marzo de 2011


Prefiero creer en lo bello que caer en el miedo de perderme en este infinito mundo de locos, sin sentido alguno.Prefiero gritar a llorar.Quiero gritarle al mundo entero que esta noche pienso ser yo misma, pienso decir lo que pasa por mi mente. Y sin duda a alguna voy a ser humana, voy a perseguir mis instintos...


Luchar por la nación o morir por traición.